domingo, 25 de septiembre de 2011

PREÁMBULO DE ALGO NUEVO

En todo lo que hemos podido estudiar, con anterioridad en este atrio, se encuentran conceptos abstractos y posiblemente de difícil comprensión. 

Para eso estamos aquí, para intentar responder a esas preguntas, para compartir con vosotros las inquietudes y sobre todo el Amor.

El Hombre posee un Espíritu Eterno, inmortal e invencible; pero su consciencia material y sensorial no puede verlo. La muerte del Cuerpo así como el sufrimiento no son más que experiencias que deben de sufrirse para aprender no sé qué misterio. Le damos, la mayoría de las veces, demasiada importancia a las cosas cuando lo realmente importante: Conseguir la plena consciencia del Alma Personalidad de nuestra presente Vida, parece no ser tenido en consideración.

El Espíritu encarna en múltiples ocasiones en diferentes formas de Vida e Inteligencia; pero la reencarnación, tal como vulgarmente se considera en Oriente, ni está clara ni tiene razón lógica de ser. Nos explicaremos seguidamente.

Cuando el Espíritu del Hombre encarna, se va introduciendo en diferentes planos cuya sustancia “material” es cada vez más densa y compacta. Esos vehículos intermedios hasta llegar al Cuerpo Físico son junto con la información de los átomos chispa “ también átomos simientes” el Alma que utiliza el Ser para manifestarse en el plano de la Materia. Algo así como una Interface. Cuando el Espíritu del Hombre decide abandonar el Cuerpo Físico “Sobreviene la Muerte” se lleva consigo la información, contenida en los átomos chispa, que merece la pena ser rescatada y es elevada a los planos espirituales.

Si la información no es lo suficientemente sutil “cargada de Amor y Humildad”, que suele ser lo más común, es abandonada junto con la consciencia de dicha Vida mal utilizada. Cuando el Espíritu encarna de nuevo, el Cuerpo nuevo y sus vehículos también lo serán. La información de las Vidas pasadas se escribirá en el ADN de las nuevas células y dicha información será el origen de la divina Intuición. El conocimiento que viene con nosotros. Aquel que no ha sido aprendido.

Pero, si por el contrario, la vida ha sido lo suficientemente productiva como para salvar una importante parte de los vehículos sutiles de la Vida. La propia consciencia de la Vida, que se vive, será preservada y se convertirá en lo que se conoce como Alma Inmortal y que acompañará al Espíritu por toda la Eternidad.

Sólo entonces, la persona que reencarne, Guía de la Humanidad, podrá acceder conscientemente a la sagrada biblioteca que llevamos consigo en el transcurso de las existencias. Es por ello, amigos y hermanos, que no tiene sentido hablar de reencarnación; ya que la única que realmente tiene importancia, para el no Iniciado, es la actual existencia. Lo que hagamos Hoy con nuestras Vidas será lo único importante. No se debe tolerar que las gentes se duerman en la complacencia del olvido de sus problemas con la idea de dejar para mañana, para otra vida, lo que nos resulte dificultoso en la actualidad.

Aralba